¿Cómo gestionar equipos multiculturales?

La globalización de los negocios y las nuevas tecnologías se traducen en una proliferación de equipos geográficamente dispersos, formados por personas de diferentes nacionalidades y culturas.

Esta realidad multicultural supone un enriquecimiento en la toma de decisiones y en el trabajo en equipo, gracias a la diversidad de puntos de vista y experiencias, pero a su vez entraña una complejidad en su gestión.


Trabajar con equipos diversos entraña complejidades no solo por los diferentes estilos de comunicación, sino también por las diferentes conductas, valores y prioridades de sus miembros. Por ello es clave tener elaborada una estrategia de gestión de equipos multiculturales y que los managers que los van a liderar estén formados y familiarizados para gestionarlos con éxito a pesar de las distancias culturales y geográficas.

 

Ventajas de los equipos multiculturales

Creatividad. La diversidad cultural aporta diferentes ideas y soluciones a un mismo problema. Ello se traduce en un incremento de la creatividad a la hora de la toma de decisiones, pues cada miembro del equipo aportará un punto de vista distinto en función de sus experiencias y habilidades personales.

Rendimiento. Los equipos formados por personas de distintos países aportan una mayor productividad a la empresa pues son capaces de diseñar productos y servicios que den respuesta a necesidades a nivel mundial, aportando una mayor riqueza y haciendo más competitiva a la empresa

Trabajo en equipo. Los equipos formados por personas de distintas culturas suelen caracterizarse por una mayor flexibilidad y tolerancia, así como una mayor capacidad de trabajo en equipo. Las diferencias culturales aumentan la cooperación y las posibilidades de llegar a acuerdos cuando surgen discrepancias entre los miembros.

 

Consejos para la gestión de equipos multiculturales

Conocer las características culturales. Aunque hay que evitar los estereotipos, es cierto que cada cultura tiene rasgos comunes que pueden influir en el mundo laboral. Mientras que las personas de centro Europa suelen tener una capacidad más analítica, la cultura latina se caracteriza por una mayor improvisación y creatividad. Es importante tener en cuenta las diferentes habilidades culturales para favorecer un mejor encaje.

Sumar habilidades. Una vez identificadas las diferentes habilidades culturales, el equipo ganará en eficacia y eficiencia si sabe sacar partido a todas ellas. No se trata de imponer una cultura dominante sino aprovechar las distintas cualidades de los diferentes miembros del equipo.

Liderazgo global. Un equipo de trabajo multicultural debe estar liderado por un manager curioso, abierto a diferentes perspectivas y que tenga capacidad de conectar personas. El líder debe conocer las características propias de cada cultura presente en su equipo con el objetivo de poder conectar a las personas de forma positiva.