¿Cómo preguntar el salario en una entrevista de trabajo?

  • Posted on: 10 December 2019
  • By: EULEN Selección

El salario es uno de los factores que más valoramos a la hora de cambiar de trabajo o aceptar una oferta laboral. No obstante, hablar de dinero a menudo es uno de los momentos más difíciles de la entrevista y lo que nos da más apuro preguntar.

Cada vez más, los reclutadores exponen claramente el rango salarial del puesto de trabajo al que optamos durante la entrevista. De hecho, en muchas ocasiones, dejan deliberadamente este tema para el final de la cita, después de haber valorado si el candidato es idóneo o no para el puesto. No obstante, hay veces en las que no se menciona el salario. Los motivos son diversos pero, sobre todo, se debe al interés del reclutador para ver cómo el candidato afronta este punto. Abordando este tema, se ponen en juego competencias muy valoradas por las compañías como, por ejemplo, la toma de decisiones, la seguridad en uno mismo o las habilidades comunicativas.

Así pues, si te encuentras en esta situación, ¿qué debes hacer? Al final de la entrevista, el reclutador acostumbra a preguntar al candidato si tiene alguna duda o si quiere saber alguna otra cosa sobre el puesto de trabajo y la compañía. Este sería un buen momento para preguntar sobre el salario, pero no debe ser la primera pregunta que formules. Si en toda la entrevista solo abres la boca para preguntar por el sueldo puedes dar a entender que es lo único que te interesa. Así pues, puedes hacer la pregunta con toda normalidad, siempre y cuando, hayas hablado o te hayas interesado por otros aspectos del trabajo.

Si, por el contrario, el entrevistador te pregunta por el salario que te gustaría cobrar, lo aconsejable es no decir una cifra exacta, sino hablar de rangos  salariales poniendo en valor tu experiencia profesional y aportación al puesto. Para ello, debes haberte informado previamente del sueldo medio que ofrece el mercado para puestos similares. Son datos que puedes encontrar buceando por Internet y consultando los diversos estudios que se publican sobre este tema o bien consultar las tablas de salarios medios que anualmente publica el Instituto Nacional de Estadística (INE). En este punto también puedes decir lo que cobras en tu empresa anterior (o actual), pero si optas por esta opción no caigas en la tentación de mentir, pues si se dan cuenta puede jugar en tu contra.

A la hora de hablar del salario, también tienes que tener en cuenta otros aspectos como los beneficios sociales. Forman parte del llamado salario emocional y entre ellos la empresa puede ofrecer seguros médicos, planes de pensiones, cheques guardería, de transporte o de comida, la financiación de la formación o la flexibilidad horaria y el teletrabajo. Son aspectos no dinerarios pero que contribuyen a una mayor satisfacción personal y profesional.

Y, finalmente, lo aconsejable es no entrar en el juego de la negociación salarial hasta que no te hayan ofrecido el trabajo. De esta forma te asegurarás que la compañía está interesada reamente en tu perfil y que la negociación salarial no es un elemento para descartar a candidatos.